HISTERIAS DEL FÚTBOL: POPÓ KUANDOMEDELE

La federación de fútbol de Ruanda en un hecho inédito ha convocado a las federaciones del fútbol africano que no clasificaron al mundial Rusia 2018 a declarar persona no grata a Popó Kuandomedele, cuestionado hechicero acusado de favorecer a las selecciones de Nigeria y Senegal. 

Aquí su historia.

Popó Kuandomedele nació en Lainopia, un pequeño país al norte de Ruanda, que se destaca por la exportación de conflictos armados. Desde muy joven y ante la falta de oportunidades de sus padres, Popó fue dejado al cuidado de Muenda, un anciano vidente y experto en rituales de sacrificio y magia negra, que le cogió cariño al niño, entre otras cosas. Muenda compartiría con Popó su sabiduría ancestral de la liturgia mágica, sus deudas y su almizcle. Ante la sorpresiva desaparición de Muenda por culpa de un safari con mala puntería, Popó decide ponerse al frente del buffet de nigromantes, brujos y adivinos de Muenda. Durante un poco más de una década, Popó lograría gracias a los resultados de sus trabajos ser reconocido por mujeres abandonadas, huérfanos y filibusteros como una mufa o yeta. La llegada de un gobierno neoliberal a Lainopia, el apogeo del reggaetón, el desembarco de curas pederastas y un préstamo del fondo Monetario Internacional, serían los eventos que desencadenarían el repudio social y las almorranas sobre Popó, quien un año antes había pronosticado la bienaventuranza y el progreso de dicho país.

Pero los poderes de Popó no pasarían inadvertidos, para el creciente y exigente mundo del fútbol. La federación alemana de balonpié a finales de los años 70´s desembolsaría una suma importante de dinero en llevar a Popó a una gira a países vecinos para que compartiera sus clarividencias y mufas. Fueron dos semanas donde Popó logró cautivar a jugadores y cuerpo técnico de la selección holandesa. Desde ese momento la selección tulipán estaría condenada a ser la eterna finalista. 

A mediados de los años 80´s y gracias al trabajo hecho con los alemanes, Popó fue invitado a Cali por un reconocido emprendedor del altiplano colombiano, Gonzalo Rodríguez Gacha, quien fungió ser un alto directivo del cuadro escarlata que necesitaba de un ritual para ganar la Copa Libertadores de América. Los invitados quedarían impactados en el evento con los poderes hipnóticos del hechicero y por la celada ocurrida en la salida del mismo. De Popó no se supo nada. Algunos manifiestan que logró salir ileso y que en la actualidad se dedica a hacer programas en Radio Todelar. Otras versiones manifiestan que Popó logró huir hacia su tierra natal, en donde se dedica a hacer hijos.

En la imagen Popó minutos antes de su charla en Cali.